España ha iniciado una investigación sobre Meta Platforms tras las acusaciones de que la compañía utilizó métodos de rastreo no revelados en dispositivos Android. El anuncio vino del presidente del gobierno Pedro Sánchez, quien dijo que el gobierno requeriría que Meta compareciera ante un comité parlamentario para explicar sus prácticas de datos. Según las autoridades, la investigación se motivó por investigaciones que sugerían que Meta recopilaba información de navegación sin notificar a los usuarios. El gobierno afirmó que la investigación evaluará si la empresa ha violado la legislación española y la normativa de la Unión Europea. Meta aún no ha emitido una respuesta pública.
Las autoridades españolas afirmaron que la supuesta conducta podría contravenir varios marcos europeos de privacidad. Entre ellos se encuentran el Reglamento General de Protección de Datos, la Directiva de Privacidad Electrónica, la Ley de Mercados Digitales y la Ley de Servicios Digitales. Los investigadores examinarán si Meta obtuvo un consentimiento válido, si los usuarios fueron informados sobre el seguimiento y si algún dato fue tratado sin base legal. También revisarán el nivel de transparencia proporcionado a las personas que utilizan los servicios de Meta. Los hallazgos pueden influir en cómo otros Estados miembros de la UE evalúan las prácticas de seguimiento basadas en dispositivos móviles.
El presidente del Gobierno Sánchez declaró que la ley nacional se aplica a todas las plataformas que operen en España y que los derechos de los usuarios deben ser protegidos. Su oficina señaló que la investigación refleja crecientes preocupaciones sobre la influencia de las grandes empresas tecnológicas en la privacidad y la gobernanza digital. Los analistas señalan que la investigación añade a los desafíos regulatorios existentes de Meta en Europa. La empresa recibió anteriormente una importante multa antimonopolio y sigue siendo objeto de varias consultas en curso centradas en publicidad y acceso a datos.
El caso pone de relieve el enfoque regulatorio en las tecnologías de seguimiento integradas en los ecosistemas móviles. Estos mecanismos pueden monitorizar el comportamiento del usuario en aplicaciones y sitios web y pueden operar a un nivel que puede no ser visible para el individuo. Los expertos en privacidad afirman que el seguimiento no revelado genera preocupaciones porque puede influir en la publicidad dirigida y el perfilado de datos sin consentimiento claro. La investigación española sugiere que la actividad a nivel de dispositivo recibirá un mayor escrutinio a medida que los reguladores intenten entender cómo se mueve la información personal entre plataformas.
Las empresas tecnológicas, los anunciantes y los desarrolladores de software siguen el caso de cerca. Muchos se basan en datos de comportamiento recogidos de dispositivos móviles y evaluarán si la investigación señala posibles cambios en las expectativas de cumplimiento. Las organizaciones que construyen servicios sobre redes publicitarias también pueden evaluar cómo sus propios procesos de recopilación de datos se alinean con las normas europeas de privacidad. El resultado de la investigación podría influir en cómo se diseñan los permisos, las cookies y los mecanismos de seguimiento de aplicaciones.
Funcionarios españoles dijeron que planean revisar la documentación de Meta y interrogar a los directivos relevantes durante la sesión parlamentaria. También examinarán las descripciones técnicas de las herramientas de seguimiento referenciadas en la investigación. Aunque la investigación aún está en sus primeras fases, los observadores esperan que cualquier infracción confirmada pueda conllevar sanciones y ajustes obligatorios en las prácticas de datos de Meta. El caso subraya los desafíos continuos que enfrentan los gobiernos al intentar regular las plataformas tecnológicas que operan en múltiples jurisdicciones.